La degeneración macular relacionada con la edad (AMD, por sus siglas en inglés) es una enfermedad asociada con el envejecimiento que gradualmente destruye la visión central y el detalle de las imágenes. La visión central hace falta para ver con claridad y para realizar tareas diarias como por ejemplo leer y conducir.
La degeneración macular afecta la mácula, la parte del ojo que permite ver los detalles pequeños. La degeneración macular no causa dolor.
En algunos casos, la degeneración macular relacionada con la edad avanza tan lentamente que las personas no notan cambio alguno en su visión. En otros casos, la enfermedad progresa más rápidamente y puede causar una pérdida de la visión en ambos ojos. La degeneración macular es una de las causas principales de la pérdida de visión en los norteamericanos mayores de 60 años.
Existen dos tipos de degeneración macular relacionada con la edad: la húmeda y la seca.
Preguntas Frecuentes sobre la Degeneración Macular Húmeda y Seca
¿Cuál es más común, la forma seca o la forma húmeda?
La forma seca es mucho más común. Más del 85 por ciento de todas las personas con degeneración macular intermedia o avanzada tienen la forma seca.
Sin embargo, si solamente se considera la degeneración macular avanzada, alrededor de dos tercios de los pacientes tienen la forma húmeda. Debido a que casi toda la pérdida en la visión resulta de la forma avanzada de la degeneración macular, la forma húmeda produce un número considerablemente mayor de pérdida de visión que la forma seca.
¿Puede la forma seca convertirse en húmeda?
Sí. Todas las personas que tienen la forma húmeda tuvieron la forma seca primero.
La forma seca puede avanzar y causar pérdida de visión sin convertirse en la forma húmeda. La forma seca también puede repentinamente convertirse en la forma húmeda, aún en la etapa inicial de la degeneración macular. No hay manera de predecir si la forma seca se convertirá en húmeda, ni cuando lo hará.
¿La forma seca tiene etapas temprana e intermedia. Tiene etapas parecidas la forma húmeda?
No. La forma húmeda se considera como degeneración macular avanzada.
¿Puede la degeneración macular avanzada ser de la forma seca o de la forma húmeda?
Sí. Tanto la forma húmeda como la forma seca avanzada se consideran degeneración macular avanzada. La pérdida en la visión puede ocurrir en cualquiera de las dos formas. En la mayoría de los casos, solamente la degeneración macular avanzada puede causar pérdida en la visión.
Las personas que tienen degeneración macular avanzada en un ojo tienen más riesgo de desarrollar la forma avanzada en el otro ojo.
Causas y Factores de Riesgo
¿Quién tiene riesgo de desarrollar la degeneración macular relacionada con la edad?
El factor de riesgo más importante es la edad. Aunque la degeneración macular relacionada con la edad puede presentarse en personas de mediana edad, los estudios indican que las personas mayores de 60 años corren mayor riesgo. Por ejemplo, un estudio halló que el riesgo para las personas de mediana edad es de alrededor del 2 por ciento mientras que para las personas mayores de 75 años el riesgo aumenta a casi el 30 por ciento.
Otros factores de riesgo incluyen:
Fumar. Puede aumentar el riesgo.
Obesidad. Las investigaciones sugieren que hay una conexión entre la obesidad y el progreso de la etapa inicial e intermedia de la degeneración macular a la etapa avanzada.
Raza. Los blancos tienen mucha más probabilidad que los afroamericanos de perder la visión por causa de la degeneración macular.
Historial familiar. Las personas con miembros de la familia de parentesco directo que tienen degeneración macular relacionada con la edad corren mayor riesgo de desarrollar la enfermedad.
Sexo. Las mujeres parecen tener mayor riesgo que los hombres.
¿Puede mi estilo de vida hacer alguna diferencia?
Su estilo de vida puede jugar un papel en reducir su riesgo de desarrollar degeneración macular relacionada con la edad.
Coma una dieta saludable con muchos vegetales de hojas verdes y pescado.
No fume.
Mantenga su presión sanguínea normal.
Controle su peso.
Haga ejercicio.
Síntomas y Detección
¿Cuáles son los síntomas?
Ninguno de los dos tipos de degeneración macular (seca y húmeda) causa dolor.
La degeneración macular seca: La señal más común del tipo seco es la visión borrosa. A medida que se deterioran las células de la mácula, se va perdiendo el detalle de lo que está adelante al mirar, como las caras de la gente o las letras de un libro. La visión borrosa suele mejorar cuando hay luz más brillante. Si la pérdida de las células sensibles a la luz es de mayor grado, es posible que aparezca un punto ciego pequeño (que va creciendo) en el centro del campo de visión.
La degeneración macular húmeda: El síntoma más común del tipo húmedo de la enfermedad es que las líneas rectas se ven onduladas. Esto se debe a que el líquido que pierden los vasos sanguíneos se acumula bajo la mácula y la eleva, distorsionando la vista. También puede aparecer un punto ciego pequeño en el tipo húmedo de la degeneración macular relacionada con la edad, y esto causa pérdida de la visión central.
¿Cómo se detecta la degeneración macular relacionada con la edad?
Si tiene más de 60 años de edad y ha tenido cambios en su visión central hace poco, es posible que sea señal de degeneración macular relacionada con la edad. Su oculista puede detectar la enfermedad mediante un examen de los ojos en el que se dilatan las pupilas. Cuando las pupilas están dilatadas, es más fácil ver el fondo del ojo. También puede hacer la prueba de Amsler, en la que se le pide que observe un diagrama que forma una cuadrícula. Si la visión central ha cambiado, las líneas se ven distorsionadas, lo cual es señal de degeneración macular relacionada con la edad.
La degeneración macular relacionada con la edad se detecta haciéndose un examen completo de los ojos que incluye:
Prueba de agudeza visual. En esta prueba se usa una tabla optométrica para medir su vista a diferentes distancias.
Examen con dilatación de las pupilas. Para dilatar o agrandar las pupilas, el oculista le pone unas gotas en los ojos. El oculista mira a través de un lente de aumento especial para examinar la retina y el nervio óptico para ver si hay señales de degeneración macular u otros problemas de los ojos. Después del examen, su visión de cerca podrá permanecer borrosa por varias horas.
Tonometría. Se utiliza un instrumento para medir la presión dentro del ojo. Para esta prueba, el oculista puede ponerle unas gotas para adormecer sus ojos.
Es posible que su oculista también le haga otras pruebas para aprender más sobre la estructura y la salud de sus ojos.
Durante el examen de los ojos, el oculista también le puede pedir que mire a una rejilla de Amsler. El diseño de la rejilla se parece a un tablero de ajedrez. Le pedirá que se cubra un ojo y que fije la vista en el punto negro situado en el centro de la rejilla. Mientras usted observa el punto, es posible que note que las líneas rectas parezcan onduladas. De igual manera, le puede parecer que faltan algunas de las líneas. Estas pueden ser señales de la degeneración macular relacionada con la edad.
NO dependa solo en la rejilla Amsler para un diagnóstico - por favor hable con su oculista.
Si su oculista sospecha que usted tiene degeneración macular húmeda, puede sugerirle que se haga una angiografía fluoresceínica. Para esta prueba se le inyecta un tinte especial en una vena de su brazo. Se toman fotografías cuando el tinte pasa por los vasos sanguíneos en la retina. Esta prueba le permite a su oculista detectar si tiene algún vaso sanguíneo que está goteando y así puede recomendar algún tratamiento.
Fuente: National Eye Institute (NEI)